lunes, 12 de septiembre de 2016

FIGLI DELLA RISURREZIONE (el internado)


Seguimos con nuestro viaje a Italia. Hoy he decidido mostraros el último de los lugares que visitamos en nuestra aventura italiana. Esta vez sin Javi y Lucía, cuyo avión estaba despegando en el momento de hacer estas fotografías.

Visitar este abandono fue una de aquellas dulces locuras a las que ya me he acostumbrado en todos estos años que llevo explorando. Luego os contaré por qué.

No me enrollo más:



Visitamos este viejo internado, un enorme complejo estudiantil. Este lugar es conocido en el mundo URBEX como "La schola di música" ya que su estancia más conocida es, valga la redundancia, una pequeña aula (y oscura) con unos pentagramas de "corchopán" en la pared:


Te suena, verdad? si la respuesta es "SÍ", enhorabuena, eres un loco del URBEX. Y si la respuesta es "NO", pues es un buen momento para conocerla. Aunque no la verás ahora, sino al final (soy así, hay que quererme tal cual.)

El motivo de dejar esta aula para el final es porque tan solo se trata de la punta del iceberg, pues esa pequeña aula forma parte de un mastodóntico edificio de 7 plantas.

7 plantas que esconden aulas, habitaciones, una iglesia, una capilla, un teatro...

Obviamente, aquella mañana cuando Sara, Miguel Ángel y yo nos dirigíamos hacia él, mientras en la emisora R-101 un tal Alvaro Soler le cantaba sus penas a una tal Sofía, no nos imaginábamos donde nos estabamos metiendo...

De hecho no lo supimos hasta que no estuvimos bien dentro...

Lo primero que vemos al acceder es la cancha exterior, un patio algo vandalizado y bastante grande


No es dificil acceder al interior desde aquí.

Una vez dentro, primera reunión: Eran las 10 de la mañana: "a las 14:00 tenemos que estar fuera" (básicamente, porque nos quedaban más de 1100 km por carretera hasta llegar a casa y esa noche debíamos estar ya en Barcelona)

Alarmas puestas, WT conectados, y cada uno por su lado como tantas otras veces.

Cuando recorro el primer pasillo y entro por la primera puerta grande, es cuando me doy cuenta de que a las 14:00 no vamos a estar fuera...y no me equivocaba.

Un montón de luces de colores me dan la bienvenida. He encontrado la iglesia...y luce así:



La luz que entra por los ventanales es hipnótica...



Espero que gracias a la foto podais ver sus dimensiones...


Detalle del altar:


Al lado del altar, abro una puerta, y me encuentro una pequeña capilla muy acogedora y cálida:



Cuantas horas han pasado ya? pero si no he visto nada aún!!


Habitación adyacente a la capilla:


Bien, salgo para afuera. Los pasillos y entresijos de edificio son una autentica locura:



Escaleras aquí y allí...


Y pasillos!


Descubro durante mi fatigada visita (recordad que la alarma del móvil sonaría a las 14:00 y el tiempo iba avanzando) varias habitaciones a las cuales presto el interés justo.


Por una puerta salgo al patio, al principal, desde donde capto estas maravillosas vistas:


De vuelta al interior, sigo navegando por sus entresijos:


Y entonces llego a la zona de las aulas (no os voy a mentir, a estas alturas no recuerdo en que piso estaba)


Las aulas estaban flanqueadas por unas hileras de ventanas. Unas daban al exterior, las otras daban al pasillo de ese piso.


Todas las aulas se encuentran en el mismo piso:





Como veis, estas estaban algo ordenadas, pero había algunas que tenían los pupitres amontonados...


Y otras tenían bastante porquería en ellas:

Esta por ejemplo estaba llena de libros tirados por el suelo:


Esta tenía bastante porquería:


Todas estas aulas las encuentro en un pasillo sin fin...


Esta no tenía mucha cosa...


Esta tenía varios pupitres llenos a rebosar de botes de cristal y tupper-wares (de aquellas cosas extrañas y sin explicación que uno encuentra a veces:


De vuelta al pasillo y a seguir descubriendo habitaciones...



Explorando...




En uno de los pisos, al final, encuentro unas salas de tamaño mediano. En seguida me doy cuenta de que acabo de encontrar la enfermería
 


Sin embargo, me llama más la atención una pequeña sala contigua, como un dispensario pequeño y que guarda una tétrica camilla:



Un pequeño museo de los horrores o pequeña sala de torturas...


Fijaros si hay goteras que el cajón está inundado...


Una sala que da pie a muchas historias y que debo agradecer a Sara su ubicación, ya que pese a pasar dos veces por la puerta, no me paré a entrar, por culpa de las malditas prisas y de estar pendiente del reloj.

Escaleras arriba, vamos a darnos de lleno con las habitaciones.



Primero encontramos esta sala con varias camas y pintada de un extraño color verde.



No lo fotografié con detalle, pero si os fijais en el agujero que hay en esa pared, se ve una especie de habitación oculta a la que solo se podía acceder por un ascensor, también oculto. La única comunicación de esa habitación tras la pared era una pequeña despensa giratoria que quedaba en la parte izquierda de la foto. Por más que lo pienso no le veo utilidad, y conforme va pasando el tiempo, más raro lo veo...


Las paredes de esta habitación grande estaban decoradas con unos originales dibujos, uno de ellos da nombre a este reportaje:



En esta planta encuentro la habitación principal, la "multihabitación" toda repleta de camas, distribuidas en 4 hileras:



Siempre hay una cama apartada de las demás. Sería de alguna persona encargada del resto?


Un verdadero paraíso, sobretodo si, como yo, sufres de Misofonía :)



Por muchos años que lleve creo que el estado de ciertos lugares abandonados me seguirá siempre sorprendiendo...


Al otro lado de la planta encontramos otra habitación parecida a esta, pero más pequeña y con las camas amontonadas:


Acompañada de su correspondiente WC...


Salgo de nuevo a explorar aquellas partes del edificio que creo que me he dejado.


Si os fijais, siempre hablo en singular, porque pese a estar en todo momento "acompañado" de Miguel Angel y de Sara, apenas nos vimos 3 o 4 veces en la exploración de este edificio.


Es decir, sabes que están ahí, te sientes realmente acompañado, pero te mueves solo por el edificio.

Esa, esa es la sensación que busco en esto, por eso llevo tantos años. Por eso lo hago.


De nuevo abajo, con idea de fotografiar la sala de música (sin saber que antes me iba a encontrar con una cosa mejor...) encuentro la cocina, imagino que era la cocina principal, debido a su tamaño...





Al salir de la cocina...SUSTO!!! HOSTIA!!! Quien hay al fondo del pasillo???


Nada, falsa alarma, se trata de Sor (......................)


Llego a una sala grande que mi imaginación convierte en un comedor. Y la vuestra?


Me acerco de nuevo, pero desde dentro, a la cancha de básket, encuentro unas salas parecidas a un gimnasio, o al menos para eso parece que se usaban...




Entonces entro por otra puerta, y si el abandono en si ya era espectacular, ahora es cuando adquiere la calificación de 5 estrellas gran lujo...


UN TEATRO!!!


Un teatro en un impresionante estado de conservación!



Saliendo por uno de los pasillos del teatro, encontramos la famosa aula de música, el rincón más famoso de este abandono, que como veis, tan solo es la punta del iceberg


La famosa aula de música, iluminada por una luz HORRIBLE que entraba por una de las ventanas traseras, medio tapada por la vegetación del exterior.


Con tiempo y paciencia salieron estas fotos...



Alguien se acuerda de la alarma del movil? pues ya hacía dos horas que había sonado. Sí, eran más de las 16:00 y esa noche debíamos dormir en Barcelona. Sobre las 16:30 horas y tras un fugaz cambio de ropa volvimos a ordenar el equipo y las maletas en el Kuga, y salíamos prestos hacia Barcelona. Tras 25 largos y terroríficos minutos de espera para pasar por un túnel en obras, una comida en un McDonald´s en Francia, quilómetros de autopista, horas de charla arreglando el mundo con Sara y Miguel, llegábamos a Barcelona pasadas las 2 de la mañana.

Sin duda fue una aventura para recordar, y de la que espero haberos hecho un poquito partícipes!

Este fue el último abandono que visitamos en nuestra aventura italiana, pero no el último que verás aquí en el blog.

Hasta pronto!!!!

2 comentarios:

Miquel dijo...

Dani, me ha encantado las fotos y el modo cómo has narrado el reportaje.
Enhorabuena!
Dani, son las 4, debes abandonar la escuela.

hernanm6 dijo...

Y si me dices que en algún momento viste el fantasma de un niño (o de algún tenebroso sacerdote) desde ya que te creo... Absolutamente fascinante, más que eso, hipnótico reporte...

Sí eres aficionado a la fotografía...

No te pierdas el juego creado por mi amigo Oriol!!